El pasado es un depósito repleto de significados. La recuperación de la memoria histórica es un proceso en el que se desentierra un pasado oculto, reprimido, ese que ha hecho a muchas familias y colectivos producir y reproducir la orden de que «no te signifiques». El reto de una sociedad que ha vivido hechos traumáticos es abrir paso a la verdad, dejar que trabaje la justicia y permitir que se pueda expresar todo ese dolor. Ex-presar que significa dejar de estar preso.